Trucos para proteger la piel en invierno

Debe ser que vivir en el norte conlleva un retraso del invierno, de forma que empezamos a notar el frío a partir de enero y en febrero la piel sufre el apogeo del mismo, evidenciando tirantez, sequedad, rojeces, descamación, mayor sensibilidad, grietas,arrugas más marcadas… Una fiesta, vamos.

No vamos a descubrir la pólvora, pero hay algunas cositas que podemos recordar a estas alturas del año para atenuar el daño. Y es que el frío hace pupa a la barrera natural de nuestra piel, contrayendo los vasos sanguíneos para mantener el calor corporal, y por eso la piel se vuelve frágil, pálida y agrietada. Si además tenemos de por sí una piel sensible o atópica, sumamos puntos para tener la tormenta perfecta en la época invernal.

Por suerte, podemos recurrir a diferentes cosméticos y cuidados adicionales que nos ayudarán a evitar que nuestra piel sufra en exceso. Allá vamos:

– No sin mi hidratante. Para conseguir una buena protección necesitamos productos con ingredientes muy nutritivos e hidratantes que consigan alcanzar todas las capas de
la piel para fortalecer la barrera epidérmica. Los aceites o en general las texturas oleosas suelen ser muy agradables en esta época.

– Vitamina C no sólo en tu desayuno. Es más que sabido que un sérum con vitamina C te ayudará a combatir el aspecto apagado de la piel y aportará ese boost de energía y vitalidad. Eso sí, más te vale aplicar siempre una protección solar para no liarla, puesto que aumenta la fotosensibilidad.

– Retinol. Una buena rutina que alcance de 2 a 4 días tu tratamiento de noche. ¿Combate los efectos del frío? Teniendo en cuenta que el frío acelera el envejecimiento de la piel, sí, es especialmente recomendable durante el invierno. Además ahora es el momento de revertir los daños del pasado verano y que tu piel se fortalezca echando «músculo». Como en el punto anterior, no se ocurra salir a la calle sin tu SPF total o pagarás caro este gym estético.

– Usar productos específicos para el cuidado de manos y labios. Ambos están especialmente expuestos al frío, así que no olvides incluir en tu rutina diaria productos para manterlos bien hidratados.