En busca de la base de maquillaje perfecta
Pueden hacerte parecer más joven, saludable, descansada, luminosa y hasta más feliz si se ponen de tu lado, pero también pueden ser maliciosas y convertirte en una versión más vieja de tí misma, reseca, crápula o de mala vida como no tengas cierto cuidado al escogerla.
¿Exagero?
Seguro que alguna vez os habéis sentido traicionadas por alguna de ellas y cientos de veces habréis visto chicas que marchan por la calle traicionadas por sus bases (aunque aquellas que van naranja-marronáceas por la vida son tema aparte…).
En mi caso, que tengo una piel cada vez más especialita -a la sequedad que tuve siempre ahora hay que sumarle cierta reactividad y ejem, algo de edad- por lo que cada vez que tengo que hacerme con una nueva me vuelvo más exigente, queriendo que hidrate, no reseque, cubra imperfecciones, tenga protección solar, no marque las arruguitas, dé un tono bonito a la piel y dure muchas horas sin tener que retocar…
¿Tanto pido?
Pues sí, debe ser que pido mucho porque da igual el presupuesto que invierta en ella suele tener alguna carencia o defecto. Pero no pierdo la esperanza, por tanto, os iré contando mis experiencias y hallazgos en la materia.
Tus opiniones